En la peor tragedia que ha vivido Estados Unidos en los últimos tiempos, el ataque del 9/11 en Nueva York, murieron miles de personas, entre ellos 300 bomberos y 23 policías llevando a cabo actos heroicos para salvar vidas. Ahora los policías y bomberos vuelven a las noticias, pero esta vez no de héroes, sino de acusados.
Setenta y dos policías, ocho bomberos retirados y una decena de oficiales de otras agencias fueron arrestados esta semana acusados de defraudar a la seguridad social tras fingir incapacidad por sufrir traumas como consecuencia de su participación en el 9/11, dijo Bill Bratton, comisionado de policía de la ciudad de Nueva York.
Durante años, los acusados hicieron falsos reclamos de discapacidad mental y física que costaron cientos de millones de dólares a los contribuyentes federales, informó una nota de la Fiscalía del condado de Nueva York.
Según los 205 cargos que se les imputan, todos los oficiales fingieron dolencias que no padecían, conspiraron para describir heridas que no tenían y sufrimientos mentales falsos. El Seguro Social les pagó alrededor de 400 millones de dólares en total y cobraban un promedio de 50,000 dólares por año individualmente por las dolencias imaginadas.
Según la acusación, demandaron compensación millonaria por sufrir PTSD: el trastorno de estrés post-traumático. O porque eran inválidos. Un sufrimiento que ameritaba compensación porque les impedía trabajar.
Pero CNN consiguió fotos que muestran a muchos de ellos de una manera diferente: en una moto acuática, manejando un helicóptero, como instructor de artes marciales , montando motocicletas, acarreando carga en un barco pesquero, haciendo tiro al blanco para comparecer en NYPD Blues, saltando en una cancha, corriendo medio maratones, jugando al golf. Etc.
“Perseguiremos cada uno de los centavos que estos poco honrosos ladrones robaron fraudulentamente, para que los verdaderos héroes bomberos, policías, enfermeros y civiles que sí arriesgaron sus vidas el 11 de septiembre de 2001 y en la actualidad sufren por ello, puedan recibir la atención que tanto necesitan”, dijo James T. Hayes, agente especial de Investigaciones Seguridad Interna en Nueva York, una división del Servicio de Inmigración y Aduanas.
Los acusados niegan los cargos, especialmente quienes son supuestamente los cabecillas de esa operación: Raymond Lavallee, de 83 años, abogado, ex agente de la FBI, ex fiscal de condado; Thomas Hale, de 89, un consultor y experto del Seguro Social; John Minerva, de 61, un miembro del sindicato de detectives; Joseph Esposito, de 64, un agente de policía jubilado.
Los acusados, dijo el fiscal Cyrus Vance, “tenían instrucciones para decirle a la Agencia de Seguridad Social que no tenían ya las habilidades básicas para la vida, como cocinar para sí mismos, vestirse, pagar sus cuentas, socializar”.
Los acusados salieron libertad tras pagar una fianza de entre 250,000 y 1 millón de dólares.
La investigación, enfatizó el fiscal, “está en sus comienzos” y podría abarcar más personas y más acusaciones. Según el Christian Science Monitor, podrían llegar a 1,000 personas. La conspiración para delinquir habría comenzado en 1988.
(Con informaciones de CNN, Christian Science Monitor, Hufftinton Post y otros.)
Para ver las fotos de los oficiales divirtiéndose, visite http://www.cnn.com/2014/01/07/justice/new-york-ptsd-9-11-scam/
Conspiran en Fraude Millonario
