Los Tres Reyes Magos

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Quiero explicarte, mi estimada Clara, que los únicos datos que tenemos sobre estos famosos personajes que vinieron del lejano Oriente, para rendir homenaje al niño Dios que acababa de nacer, los encontramos en el evangelio de S. Mateo: Nacido Jesús en Belén de Judea, en tiempos del rey Herodes, unos magos que venían del Oriente se presentaron en Jerusa-

lén , diciendo: ¿Dónde está el Rey de los judíos que ha nacido? Pues vimos su estrella en el Oriente y hemos venido a adorarle. En oyéndolo, el rey Herodes se sobresaltó y con él toda Jerusalén. Convocó a todos los sumos sacerdotes y escribas del pueblo, y por ellos se estuvo informando del lugar donde habia de nacer el Cristo. Ellos le dijeron: -En Be-

lén de Judea porque así está escrito por medio del Profeta. Como puedes observar, mi esti-

mada Clara, estos apáticos maestros de la ley supieron informar a Herodes que el Mesías debía nacer en Belén, la ciudad donde había nacido el rey David, pero no fueron capaces de acompañar a tan distinguidos visitantes a rendir adoración al niño Dios que acababa de nacer en un establo. Ya la sagrada familia tenia una casa en donde vivir esperando volver a Nazaret, su lugar de origen. Los magos peregrinos llegados del Oriente visitaron el lugar donde estaban María y José con su divino niño, y adorándole con gran reverencia, le ofrecieron oro, incienso y mirra; obsequios preciosos de gran valor, en los que la tradición ha visto el reconocimiento implícito de la Divina Realeza de Cristo nuestro Señor. Como fácilmente podemos apreciar, mi estimada Clara, la sagrada biblia no nos dice que estos personajes llegados del lejano Oriente, eran reyes, ni siquiera que eran tres y mucho menos que se nombraban Melchor, Gaspar y Baltazar. Los orientales llamaban magos a sus doctores en ciencias; en el idioma persa la palabra mago significa sacerdote. Buscando información sobre este histórico hecho, encontré unos curiosos datos en el evangelio apócrifo armenio que lleva el título de: La infancia de Jesús. Aquí podemos leer: Un ángel se apresuró a ir al país de los persas para prevenir a los reyes magos y ordenarles que fueran a adorar al niño recién nacido. Después de caminar durante nueve meses, y guiados por la estrella misteriosa, llegaron al lugar donde encontraron al niño en compañía de sus padres María y José. Los reyes eran tres hermanos, llamados: Melchor, rey de los persas; Baltazar, rey de los indios y Gaspar que reinaba sobre los árabes. Hasta aquí el relato apócrifo. Demás está decir que, nosotros los cristianos, y especialmente los hispanos, tenemos que seguir celebrando esta linda tradición que ha fascinado a grandes y chicos, y que hace felices a tantos niños que esperan ilusionados el día 5 de enero de cada año la llegada de los simpáticos tres reyes magos montados en sus camellos cargados de juguetes y golosinas. ¡Ah…y lo maravilloso de toda esta historia! ¿Cómo es posible que en apenas una noche estos tres encantadores personajes puedan visitar a todos los buenos niños del mundo? ¡Realmente es un bellísimo misterio que hasta ahora nadie ha podido explicar! ¡Vivan Gaspar, Melchor y Baltazar y que sigan haciendo felices a todos los buenos niños de este pequeño mundo en el cual vivimos!

FINIS CORONAT OPUS

Los Tres Reyes Magos