¡La situación es grave!
Francisco Tabernilla
El sacerdote cubano José Conrado Rodríguez, conocido por sus fuertes declaraciones sobre la dictadura comunista en Cuba, afirmó que la ayuda extranjera enviada el año pasado a Santiago de Cuba después del huracán Sandy, fue desviada hacia instalaciones militares y del gobierno, pero negada a viviendas particulares. “La situación en Santiago es muy grave”, porque muchas de las más de 100,000 viviendas dañadas por la tormenta no han sido reparadas, dijo el Padre Rodríguez a el Nuevo Herald el martes 25 de junio, 2013. “La ayuda no ha llegado a la gente”
El Padre Conrado hizo las acusaciones inicialmente en una carta pública al jefe del Partido Comunista en la provincia de Santiago de Cuba, Lázaro Expósito, instándole a tomar medidas contra el desvío de la ayuda y “la corrupción que lo rodea”. “Con estupor hemos visto cómo se escamotea la entrega de la ayuda que de tantos países llegó a nuestro pueblo”, escribió; “como esa ayuda era vendida… a precios inflados, en flagrante violación de la intención de los donantes”.
“Hemos visto repararse las instalaciones del gobierno o el ejército en tiempo record, mientras el pueblo sigue con sus techos sin cubrir”, escribió en la carta, fechada el 16 de junio, 2013.
En advertencia de posibles disturbios civiles, agregó “somos testigos de la frustración de la gente, de su desesperación y su impotencia, de un silencio… amenazador que nos hace pensar que en algún momento podría estallar con una furia incontenible y justificada”.
Dijo también a el Nuevo Herald que diplomáticos extranjeros que lo visitaron después de Sandy notaron “un grado de exasperación muy alto” en la población de la ciudad de Santiago de Cuba, escogida este año como sede de las celebraciones del 26 de julio, que marcan el inicio de la revolución de Castro.
El huracán Sandy azotó el oriente de Cuba en octubre, causando la muerte de 11 personas y daños por más de $2 mil millones. Muchas de las 100,000 familias cuyas viviendas resultaron dañadas permanecen sin techo o están hacinadas en una o dos habitaciones cuyos techos sobrevivieron, dijo el sacerdote Rodríguez.
El sacerdote cuya propia Iglesia y casa parroquial en la ciudad de Santiago perdieron parte de sus techos, dijo que le ofrecieron en el mercado negro chapas de cubiertas de zinc de unos seis por tres pies a 300 pesos por pieza, en comparación con las piezas de nueve por seis pies, a 250 pesos, en el mercado legal.
Pastores protestantes en el este de Cuba se quejaron de que las autoridades se apropiaron de la asistencia que ellos estaban tratando de distribuir a la víctimas de Sandy, según un informe del Departamento de Estado de EEUU sobre la libertad religiosa en todo el mundo, publicado el mes pasado.
El Padre Rodríguez quien se ha quejado de que la jerarquía de la Iglesia Católica ha sido demasiado mansa en sus relaciones con el gobierno comunista, también señaló en su carta a Expósito que ésta debería haber sido escrita por alguien más que un simple sacerdote.
“Soy consciente de que, dada la estructura jerárquica de la Iglesia, propiamente no me corresponde a mí hacer esta gestión, sino a mi obispo, a quien varias veces le he sugerido hacerlo”, escribió el sacerdote.
El Padre Rodríguez también dijo a el Nuevo Herald durante una larga entrevista que la jerarquía de la Iglesia era “mucho más conservadora ahora. Cuando era mucho más difícil, era más audaz”.
Anunció que en junio se le había pedido que entregara su parroquia y trabajara en un libro sobre la Virgen de la Caridad, patrona de Cuba. No le fue ofrecida una nueva parroquia, de modo que el sacerdote obtuvo una asignación en la diócesis de Cienfuegos.
Dijo que estaba en Miami al inicio de un viaje de dos meses que lo llevará a Brasil para la visita del Papa Francisco, así como a España, Argentina, Chile, Colombia, México y tal vez Costa Rica.
El sacerdote escribió una carta pública a Fidel Castro en 1994, culpándolo de la caótica situación de la economía de Cuba, pidiendo elecciones justas e instándolo a iniciar un diálogo con los disidentes y exiliados. Siguió en el 2009 con una carta abierta al hermano sucesor, Raúl Castro, instándolo a realizar cambios en la política y en la economía de la isla, de estilo soviético.
Recibió el premio “Tolerancia Plus” el año pasado, que le fue otorgado por tres grupos disidentes cubanos. Persiste en su posición anticomunista ni ha cedido en ninguno de sus planteamientos por la libertad de Cuba en defensa del pueblo cubano desde aquella memorable carta a Fidel Castro y todos los cubanos debemos reconocerle su postura digna y elegante frente de un régimen donde la vida no vale nada y el “paredón” se lo aplican a cualquier ciudadano sin celebrarle un juicio sin garantías ni nada que lo ampare en tan peligrosa tarea al enjuiciar públicamente al régimen más inhumano y degradante que ha conocido la América nuestra.
Silencio Amenazador en Santiago de Cuba
Francisco Tabernilla